Salimos de Milton dirección Alexandra. Seguimos firmes en nuestra idea de alquilar una avioneta en Queenstown o Crownwell para sobrevolar los fiordos y algún glaciar. Hoy parece ser que sí: hemos encontrado vuelo desde Wanaka, así que vamos para allá (en la foto: desde Wanaka, el monte Aspiring al fondo).
Por desgracia, el inglés de Escocia y el de NZ no debe ser el mismo (cáptese la ironía, aunque no deja de "ser cierto"; véase un poco más abajo el enlace del fush'n chups), y se produce un pequeño malentendido entre Alan y el piloto. El vuelo que queremos hacer no es posible debido, de nuevo, a las condiciones meteorológicas, así que con las mismas, cogemos carretera a Franz Josef.
Es en este tramo donde un flipao me intenta adelantar cuando faltaban 100m para una curva, y de repente sale un coche de la curva y... no pasó nada porque había distancia para evitar el accidente e íbamos a 80 km/h (la carretera -y el cansancio- no daban para más). Pero bueno, susto gordo el que se pegaron los otros dos, que, aunque era un puerto, yo iba por el carril interior.
La idea es alquilar en FJ un helicóptero para intentar hacer heli-hike en el glaciar, pero al llegar allí resulta que está todo lleno y es imposible hacerlo :(
Jackson Bay era un contínuo de agua que, sin ser mucho, empapaba hasta los huesos. Hacemos parada y fush'n chups en el sitio más pintoresco de la isla sur...
Y mientras... preguntando si alguien nos podía vender gasolina! No cayó esa breva y si me véis conduciendo a 75km/h para estirar el depósito... Lamentable ;)
La tarde aún nos reservaba aún sorpresas. Por apurar la gasolina (estaba bastante cara en la última gasolinera), íbamos con el depósito casi seco y no pudimos ir hasta donde queríamos por temor a quedarnos tirados. A nuestro favor: las gasolineras no abundan en la isla sur (en esa zona había 2 gasolineras -una junto a la otra- en un radio de 200km...) y que en el mapa de carreteras no indicaba donde estaban.
El caso es que al ir a echar gasolina, perdimos la tapa del depósito. Hora y medio buscándola en medio de una lluvia poco intensa pero constante con resultado negativo. La imaginación me llevó a hacer un tapón provisional con una bolsa de pan bimbo y una piedra en su interior para no ser absorbida por succión...
De postre, al llegar a Fox Glacier nos encontramos con que está casi todo cerrado (era ya tarde) y no encontramos ningún sitio para cenar... Salvo un bar donde como mucho nos calentaban algo precocinado en el microondas, así que con estas me fui a la cama, si bien Alan y Chechu se quedaron a "cenar".
En fin, un día para olvidar.
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