
El problema es que en el piso de los tíos no había maquillaje hasta que llegaron las chicas. Imaginaros entonces... Lo mismo valía un rotulador que un corcho quemado... Y porque no teníamos brocha y pintura, porque sino... Parda la habíamos liado.
Lo curioso es que no todos iban de muerte, brujas o cosas similares. Vimos a trogloditas, la Cenicienta...
Estuvo bien. Y al chapar los bares, afterparty en casa de las chicas :)Y lo mejor... ver cómo se desmaquillaban aquellos que habían usado rotuladores. Frota que te frota y tirados todos por los suelos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario