Justo debajo de nuestra habitación teníamos un lobo, pero... ¡estaba atado! No me quedó muy claro el asunto. Supongo que sería de alguien que dormía en el albergue con nosotros. ¿Cómo soportarán el frío estos animales? Quiero decir que... estábamos a -25ºC y ellos, cual dominguero en el parque...
La verdad es que la zona es increíble. De camino a Noruega, nos encontramos con una granja de alces. Nos paramos como unos posesos y empezamos a disparar fotos cual japoneses ;) Pero es que ver cosas como esas, no lo haces todos los días. 
Dado que el domingo era mi cumpleaños, por la noche lo celebramos en el albuege. La verdad es que fue un cumpleaños muy diferente. En Laponia. Con gente de muchísimas nacionalidades... Y es que nos juntamos en la cocina del albergue nosotros (españoles, alemanes, griegos y rusos) con otro grupo heterogéneo (norteamericanos, australianos, mejicanos y franceses). 
Me hicieron un vídeo en el que felicitaron cada uno en su idioma, algo que, sin duda me emocionó, y que, como comprenderéis, lo guardo para mí ;)
Por cierto, en la imagen anterior, podéis ver el amanecer en Abisko.
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